Bioseguridad en el Quirófano

comprende todas las medidas preventivas (asepsia, esterilización de materiales y barreras protectoras) destinadas a mantener la seguridad del paciente y del equipo médico.

Un estudio internacional documentó que las infecciones del sitio quirúrgico ocurren en alrededor del 5% de las intervenciones en países desarrollados y hasta un 10–25% en países en desarrollo. Estas infecciones constituyen aproximadamente el 20% de todas las infecciones intrahospitalarias, lo que resalta la necesidad de estrictos protocolos de control de infecciones. La implantación rigurosa de medidas de bioseguridad en quirófano mejora los resultados de estas medidas es clave para mejorar los resultados quirúrgicos y optimizar los recursos sanitarios.

Procedimientos de bioseguridad en el quirófano para personal médico

Las precauciones universales establecen que todos los pacientes y fluidos corporales deben considerarse potencialmente infecciosos, por lo que es imprescindible aplicar barreras de protección y protocolos estandarizados en el quirófano. La AORN (Asociación de Enfermeras Registradas Perioperatorias, por sus siglas en Inglés) subraya que mantener un entorno higiénicamente limpio es fundamental, tanto dentro como fuera del quirófano, y que la vestimenta quirúrgica (bata estéril, gorro y mascarilla) juega un papel vital para reducir el riesgo de infecciones del sitio quirúrgico. Estas medidas protegen al paciente y al personal de la contaminación cruzada.

Además, la higiene de manos del equipo quirúrgico es esencial. Se sabe que las bacterias en las manos del cirujano pueden provocar infecciones en la herida operatoria, por lo que la CDC (Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, por sus siglas en Inglés) recomienda realizar un lavado quirúrgico con jabón antiséptico antes de cada procedimiento. Igualmente, se aconseja el uso de doble guantes en intervenciones invasivas para minimizar la contaminación en caso de ruptura de un guantes. En conjunto, estas prácticas de asepsia y protección personal son la base de cualquier protocolo de bioseguridad en el quirófano.

Equipo médico aplicando medidas de bioseguridad en el quirófano

Insumos clave para garantizar la bioseguridad en el quirófano

La siguiente checklist enumera los insumos críticos que deben estar disponibles antes, durante y después de cada cirugía:

    • Equipo de protección personal (EPP): Batas quirúrgicas estériles, gorros, mascarillas de alta filtración y calzas. El uso de vestimenta quirúrgica completa es obligatorio en las zonas restringidas y evita la dispersión de microorganismos hacia el paciente y el ambiente.
    • Higiene de manos y guantes estériles: Jabón antiséptico y dispensadores de gel hidroalcohólico. Se debe efectuar un lavado quirúrgico prolongado de manos antes de ponerse los guantes. Además, emplear guantes estériles de talla adecuada (preferiblemente de nitrilo) y considerar la doble guantada en cirugías de alto riesgo, tal como recomienda la CDC.
    • Soluciones antisépticas para la piel: Preparaciones de clorhexidina en alcohol (2–4%) o povidona yodada (10%) para desinfectar la piel del paciente en el sitio operatorio. Estudios recientes han demostrado que la povidona yodada en alcohol es tan eficaz como la clorhexidina para prevenir infecciones del sitio quirúrgico.
    • Campos quirúrgicos y material de cobertura estériles: Paños o campos quirúrgicos estériles para delimitar el área operatoria, así como gasas, compresas y apósitos estériles para el manejo de fluidos y protección de incisiones. Todo este material debe mantenerse sellado y en condiciones de esterilidad hasta su uso.
    • Instrumental quirúrgico esterilizado y central de esterilización: Juegos completos de instrumentos según el tipo de cirugía (pinzas, tijeras, portaagujas, separadores, etc.), esterilizados mediante autoclave u otros métodos validados. El área de procesamiento central debe contar con zonas separadas para descontaminación, empaquetado y esterilización, con flujo de aire controlado, garantizando ciclos de vapor correctos y el uso de indicadores biológicos.
    • Desinfectantes para superficies y limpieza ambiental: Soluciones desinfectantes hospitalarias (por ejemplo, glutaraldehído al 2%, soluciones de clorhexidina diluida o amonios cuaternarios) para limpiar instrumental reutilizable, mesas quirúrgicas, lámparas y pisos. Es fundamental desinfectar el mobiliario y equipos (respiradores, monitores, estaciones de anestesia) antes y después de cada procedimiento.
  • Suministros desechables y gestión de residuos: Insumos descartables estériles como jeringas, agujas, hojas de bisturí, sondas o catéteres. Contenedores específicos para objetos punzocortantes (de color rojo) y bolsas para residuos biológicos (amarillas) deben ubicarse junto a la mesa de operación para su inmediata disposición.

La dedicación a la bioseguridad en el quirófano es la base de la excelencia quirúrgica y marca la diferencia en el cuidado integral de nuestros pacientes.

Lcda. Jocelyne Fajardo.

Incorporar sistemáticamente estos elementos en la verificación preoperatoria es parte integral de los protocolos quirúrgicos. De hecho, se recomienda estandarizar los insumos quirúrgicos en todos los procedimientos como parte de un protocolo clínico coordinado, asegurando así su correcta disponibilidad y uso.

Consejos prácticos para reforzar la bioseguridad en el quirófano

    • Minimizar el tránsito en el quirófano: Limite al personal esencial durante la cirugía y reduzca los desplazamientos dentro y fuera del área operatoria. La AORN señala que el número de personas presentes está directamente relacionado con la contaminación aérea del quirófano, por lo que controlar el flujo reduce el riesgo de infecciones.
    • Uso de listas de verificación quirúrgica: Emplee checklists preoperatorios (sign-in), intraoperatorios (time-out) y postoperatorios (sign-out) que confirmen la identificación del paciente, el sitio quirúrgico y la disponibilidad de todos los insumos. Estos protocolos estandarizados (por ejemplo, la lista de cirugía segura de la OMS) ayudan a evitar omisiones críticas antes de comenzar.
    • Capacitación continua del equipo: Fomente la formación en quirófano y la actualización periódica sobre técnicas de asepsia y bioseguridad en quirófano. El entrenamiento regular refuerza la cultura de seguridad y mantiene al personal alerta ante posibles brechas en el protocolo.
    • Verificación y mantenimiento de equipos: Asegúrese de que autoclaves, esterilizadores y demás equipos de descontaminación estén calibrados y certificados. Revise periódicamente los indicadores de esterilización y realice mantenimientos preventivos. También compruebe el correcto funcionamiento de monitores, respiradores y desfibriladores antes de cada cirugía.
    • Selección de proveedores confiables: Adquiera insumos de distribuidores acreditados para garantizar su calidad y trazabilidad. Proveedores reconocidos (por ejemplo, B-Medical) ofrecen garantías y soporte técnico, lo cual es clave para confiar en la esterilidad y desempeño de los productos suministrados.
    • Cultura de seguridad del paciente: Promueva un ambiente donde cualquier miembro del equipo pueda alertar sobre fallos o incidentes sin represalias. Documentar y analizar eventos adversos, así como dar retroalimentación, fortalece la adherencia al protocolo y mejora continuamente la seguridad quirúrgica.
El cumplimiento meticuloso de los protocolos de asepsia no solo protege vidas, también refuerza la confianza en la atención quirúrgica. Lcda. Jocelyne Fajardo.

Compromiso con la excelencia en asepsia

El cumplimiento meticuloso de estos protocolos no solo protege vidas, sino que también refuerza la confianza en la atención quirúrgica. Mantener estándares elevados de asepsia en cada cirugía refleja el compromiso ético-profesional con la salud del paciente. Cada barrera protectora, cada insumo estéril y cada paso de verificación implementados rigurosamente significan menos complicaciones y mejores resultados. En definitiva, la dedicación a la bioseguridad en el quirófano es la base de la excelencia quirúrgica y marca la diferencia en el cuidado integral de nuestros pacientes.